Según una nueva investigación, si puede cambiar su consumo de azúcar refinada y usar miel cruda pura en su lugar, los beneficios para la salud pueden ser enormes.
¿Qué es la miel cruda? Es un edulcorante puro, sin filtrar y sin pasteurizar elaborado por las abejas a partir del néctar de las flores. La mayor parte de la miel que se consume hoy en día es miel procesada que ha sido calentada y filtrada desde que se recogió de la colmena. A diferencia de la miel procesada, la miel cruda no pierde su increíble valor nutricional y sus poderes para la salud. Puede ayudar con todo, desde poca energía hasta problemas para dormir y alergias estacionales. Cambiar a miel cruda puede incluso ayudar a perder peso en comparación con las dietas que contienen azúcar o jarabe de maíz con alto contenido de fructosa.
(1)Miel en la protección de la obesidad
Los estudios de investigación han relacionado el consumo de miel con la pérdida de peso. Reemplazar el azúcar con miel en realidad puede ayudar a prevenir el aumento de kilos de más y también a reducir el azúcar en la sangre. Los resultados también sugieren que, en comparación con el azúcar, la miel puede reducir los triglicéridos séricos. la miel cruda puede activar hormonas que suprimen el apetito. En general, los investigadores concluyeron que el consumo de miel ofrece posibles efectos protectores contra la obesidad.
(2) Contrarresta las alergias al polen
La miel cruda contiene polen de abeja, que se sabe que previene las infecciones, proporciona un alivio natural de las alergias y aumenta la inmunidad general. Muchas personas que sufren de alergias estacionales han encontrado que la miel cruda local es útil porque los insensibiliza a la fauna que desencadena su reacción alérgica. Los investigadores absorbieron que el consumo de miel mejoró los síntomas generales e individuales de la rinitis alérgica. La rinitis alérgica es una respuesta alérgica que causa picazón, ojos llorosos, estornudos y otros síntomas similares.
(3) Fuente de energía natural
La miel cruda contiene azúcares naturales (80 por ciento), agua (18 por ciento) y minerales, vitaminas, polen y proteínas (2 por ciento). No sorprende que la miel haya sido llamada “el combustible perfecto para correr”. Proporciona un suministro de energía de fácil absorción en forma de glucógeno hepático, lo que lo hace ideal para empezar la mañana con energía y como fuente de energía antes y después del ejercicio.